

Qué es un “swap” y cómo impacta en las reservas del Banco Central
El Banco Central confirmó un nuevo acuerdo con el Tesoro de Estados Unidos por u$s 20.000 millones. Se trata de un instrumento financiero que permite reforzar las reservas sin emitir deuda tradicional. Cómo funciona, qué ventajas tiene y por qué no siempre implica dólares de libre disponibilidad.
Actualidad22 de octubre de 2025 Infoempresas


⌚ Tiempo de lectura: 1:45 min
Un acuerdo clave para estabilizar el mercado cambiario
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció la firma de un acuerdo de estabilización cambiaria con el Tesoro de Estados Unidos, por hasta u$s 20.000 millones, en el marco de la visita del presidente Javier Milei a Washington y su reunión con Donald Trump.
“El objetivo es contribuir a la estabilidad macroeconómica de la Argentina, preservar la estabilidad de precios y promover un crecimiento económico sostenible”, detalló el comunicado oficial.
La medida refuerza la estrategia del Gobierno de sumar respaldo internacional a las reservas y contener la volatilidad del dólar antes de las elecciones legislativas del 26 de octubre.

Qué es un swap y cómo funciona
Un swap de monedas entre bancos centrales es un intercambio temporal de divisas.
En este tipo de operaciones, dos bancos centrales se prestan mutuamente sus monedas nacionales por un plazo determinado y con la obligación de revertir el intercambio a un tipo de cambio pactado.
Mecánica del swap:
Intercambio inicial: el BCRA entrega pesos y recibe dólares (u otra moneda).
Uso de fondos: durante el plazo acordado, utiliza esas divisas para reforzar sus reservas o abastecer al mercado.
Reversión: al vencimiento, devuelve los dólares y recupera los pesos, pagando los intereses acordados.
“El swap no es un préstamo tradicional, sino un intercambio reversible que mejora la liquidez en moneda extranjera sin endeudamiento externo directo”, explican los especialistas.
Propósito y ventajas
Los swaps se utilizan en contextos de escasez de divisas o tensión cambiaria, y tienen tres objetivos principales:
Asegurar liquidez en moneda extranjera.
Facilitar el comercio bilateral sin pasar necesariamente por el dólar.
Reforzar las reservas internacionales, mejorando la confianza del mercado.
Además, suelen implicar tasas de interés más bajas que las del mercado internacional, dado que son acuerdos entre bancos centrales, no préstamos financieros tradicionales.

Limitaciones: no siempre son dólares utilizables
Aunque se presentan como refuerzo de reservas, los swaps no siempre representan dólares de libre disponibilidad.
En muchos casos, las divisas recibidas solo pueden usarse para operaciones comerciales o transacciones bilaterales específicas, y no para intervenir libremente en el mercado cambiario.
Por eso, los economistas diferencian entre:
Reservas brutas: incluyen swaps, oro, DEG y otros activos.
Reservas netas: representan los dólares efectivamente disponibles.
“Un swap mejora el respaldo contable del Banco Central, pero no necesariamente su capacidad de intervención inmediata”, advierten analistas.
Antecedente con China
El BCRA ya tiene experiencia en este tipo de instrumentos: el swap de monedas con el Banco Popular de China, vigente desde 2009.
El acuerdo, renovado en abril, mantiene activo un tramo de 35.000 millones de yuanes (u$s 5.000 millones) hasta agosto de 2026, y permite al país pagar importaciones desde China sin usar dólares.
“La activación del swap evita una caída de reservas en un escenario de escasez de divisas y ayuda a transitar hacia un régimen monetario más sostenible”, explicó la autoridad monetaria.
El swap con Estados Unidos representa una herramienta financiera clave para estabilizar el frente cambiario, aunque no equivale a una inyección directa de dólares líquidos.
Sirve para mejorar las expectativas, aumentar la cobertura de reservas y dar aire al Banco Central, pero su efectividad dependerá de la confianza que genere el programa económico.
En palabras de un economista del sector: “El swap compra tiempo, no soluciones estructurales. Pero en la Argentina actual, el tiempo también vale oro.”




